A casi 300 políticos a diferentes niveles del gobierno de Guatemala les ha sido restringido el acceso a Estados Unidos, después de las acciones de la Fiscalía que amenazan los resultados de las elecciones generales que dieron la presidencia a Bernardo Arévalo.
Estados Unidos está tomando medidas para imponer restricciones de visa a casi 300 ciudadanos guatemaltecos por “socavar la democracia y el Estado de derecho”, dijo el lunes el Departamento de Estado.
“Estados Unidos continuará adoptando medidas para imponer tales restricciones a cualquier persona que socave la democracia de Guatemala”, informó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en un comunicado.
Fiscales guatemaltecos han cuestionado la victoria electoral del presidente electo del país centroamericano, Bernardo Arévalo, cuya investidura está prevista para enero.
Arévalo rechazó el viernes enérgicamente una maniobra legal de los fiscales locales para invalidar su victoria electoral y calificó el esfuerzo de “perverso” y de “golpe de Estado”.
La acción del Gobierno estadounidense también va dirigida a representantes del sector privado y sus familiares, dijo Miller, el portavoz de Estado.
Washington condena enérgicamente las medidas del Ministerio Público de Guatemala y otros, incluido un anuncio contra trabajadores electorales y representantes de partidos, su petición de anular los resultados de los comicios y su solicitud de retirar la inmunidad a Arévalo, añadió Miller.
“Estas medidas temerarias se suman a una lista extensa de otras acciones antidemocráticas”, afirmó. “El pueblo guatemalteco se ha expresado. Sus voces deben ser respetadas”.
Desde que Arévalo logró resultados mucho mejores de lo esperado en las elecciones de primera vuelta de junio, con lo que pasó la decisiva segunda vuelta de agosto, él y su partido de centro-izquierda Movimiento Semilla se han enfrentado a investigaciones de la Fiscalía General, que ha alegado irregularidades en el registro del partido.
El país norteamericano y otros occidentales han respaldado a Arévalo, que obtuvo una aplastante victoria en la segunda vuelta frente a un candidato afín al sistema, afirmando que las investigaciones son un intento coordinado de minarlos a él y a la democracia en Guatemala, el país más poblado de Centroamérica.
Atención desde EEUU
Las últimas medidas de la Fiscalía el viernes coincidieron con la visita de una comitiva del Congreso de EEUU que se reunió con autoridades del gobierno actual y de la administración electa.
El senador Tim Kaine aseguró que estaban en Guatemala porque era “un momento de oportunidad y peligro”. “Parece que estamos mirando un golpe de estado”, dijo Kaine, en un mensaje similar al expresado estos días por la OEA.
Por su parte, la congresista Delia Ramírez, del estado de Illinois, apuntó: “Creo que lo abusivo es negarle al pueblo guatemalteco la democracia y no honrar el voto que ellos dieron”.