Los ojos de los amantes al béisbol están puesto sobre República Dominicana tras la firma histórica del toletero Juan Soto la noche del domingo con los Mets de Nueva York.
Luego de una extensa espera sobre el monto y el equipo que se quedaría a largo plazo con los servicios del jugador criollo, la franquicia del multimillonario Steven Cohen sacó la mejor parte tras ofrecerle un contrato récord de 765 millones de dólares por 15 años, superando los 760 millones por 16 años que le hicieran los Yankees de Nueva York.
Hubo una cláusula que pudo incidir en que el dominicano de 26 años de edad se inclinara para vestir el uniforme de la organización que apunta a grandes cosas desde que Cohen adquirió esa franquicia en el año 2020.
El acuerdo de Soto contiene una cláusula de rescisión después de la quinta temporada sin aplazamientos. Juan puede optar por no participar después de la temporada 2029 si los Mets no aumentan su salario de $ 51 millones a $ 55 millones durante los últimos 10 años del contrato.
Además, el contrato de Soto le pagará $305 millones (incluyendo un bono por firmar de $75 millones) en los primeros cinco años de su contrato por un valor anual promedio de $61 millones durante ese período y el dinero adicional haría que su acuerdo valga más de $800 millones.
El acuerdo, que está pendiente de un examen físico, eclipsa el contrato de 700 millones de dólares por 10 años (que incluía aplazamientos significativos) que Shohei Ohtani recibió de los Dodgers el invierno pasado.
El contrato de Soto es, por mucho, el más grande que los Mets han otorgado, más del doble del pacto de 10 años y US$341 millones de Francisco Lindor. Es el acuerdo más grande en la historia de Major League Baseball. También es más grande que el de Lionel Messi con el Barcelona, más grande que el de Patrick Mahomes con los Chiefs de Kansas City) es alucinante. También superan los ingresos de otras estrellas del deporte, como LeBron James, Canelo Álvarez o Max Verstappen. El baloncestista de Los Ángeles Lakers es el jugador de baloncesto mejor pagado del planeta, con ingresos de casi 130 millones de dólares por curso, de los cuales sólo un tercio corresponden a su salario como jugador de la franquicia de Los Ángeles, lo que se traduce en poco más de 43 millones de dólares en la cancha.