El diputado Bray Vargas afirmó que ha quedado demostrado, una vez más, que la corrupción en la República Dominicana “no tiene partido ni color político”, y advirtió que muchas veces se disfraza de respeto y poder, “con saco, corbata y cargos públicos”.
El legislador sostuvo que mientras a miles de jóvenes se les cierran oportunidades laborales por su apariencia, tatuajes o forma de vestir, “los verdaderos delincuentes visten de smoking”, refiriéndose a quienes, desde posiciones de poder, se aprovechan de los recursos del Estado.
Vargas señaló que lo ocurrido en el Seguro Nacional de Salud (SENASA) no puede catalogarse como un simple escándalo administrativo, sino como una de las expresiones más crueles de corrupción, ya que impacta directamente la salud de los sectores más vulnerables del país.
“Estamos hablando de ancianos sin acceso a sus tratamientos, niños sin medicamentos y madres que salen de un hospital con una receta en la mano, pero sin dinero en el bolsillo para comprarla”, expresó.
El diputado subrayó que en el caso SENASA aún faltan responsables por identificar, incluyendo cómplices y actores indirectos, y enfatizó que todos deben responder ante la justicia “sin excepciones, sin padrinos y sin acuerdos debajo de la mesa”.
No obstante, Vargas destacó que mientras se establecen responsabilidades, existe una obligación moral y social inaplazable: rescatar SENASA, fortalecer sus servicios y garantizar respuestas efectivas a miles de dominicanos que dependen del sistema público de salud para continuar sus tratamientos médicos.
“Este no es un tema partidario, es un tema humano. La salud no puede ser rehén de la corrupción”, concluyó




