Santo Domingo.-A solicitud del Ministerio Público, el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenó a 20 años de prisión a un hombre hallado culpable de provocarle la muerte a su expareja, en un hecho ocurrido el 9 de junio de 2024, en el sector Villas Agrícolas.
José Rafael García Hernández (Papo) fue condenado por la muerte a causa de heridas de arma blanca de Raisa Guzmán (Andreina).
Las juezas Esmirna Gisselle Méndez, Tania Yunes y Jissel Naranjo dispusieron que el condenado cumpla la sentencia en el centro penitenciario de La Victoria, por homicidio voluntario, en violación a los artículos 295 y 304 del Código Penal Dominicano, así como a los artículos 83 y 86 de la Ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados, que sancionan el porte ilegal de armas blancas.
El Ministerio Público, representado por los fiscales litigantes John Suncar y Carolin Junesca de Oleo, logró incorporar pruebas testimoniales, periciales y materiales que demostraron que el procesado cometió el crimen tras una discusión sostenida días antes con la víctima. El arma blanca utilizada fue adquirida previamente por el agresor con el propósito deliberado de quitarle la vida a su expareja.
De acuerdo con la investigación de la procuradora fiscal Vidalis Mora Díaz, adscrita al Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos contra la Persona (Homicidios), el ahora condenado citó a la víctima en su lugar de trabajo, el colmado Willy Súper Fría, donde le ofreció bebidas alcohólicas hasta que se percató de que estaba en estado de embriaguez.
Acto seguido, pidió a los clientes presentes que se retiraran, apagó las luces, desconectó las cámaras de seguridad y atacó a Guzmán con el arma blanca, ocasionándole múltiples heridas mortales, según consta en el acta de levantamiento del cadáver No. 85628, emitida por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
Tras cometer el crimen, García Hernández llamó insistentemente al propietario del colmado, Wilis Gabriel Ventura Hernández, a quien confesó lo sucedido y le sugirió deshacerse del cuerpo.
Ventura Hernández alertó al Sistema Nacional de Atención a Emergencias 9-1-1. Durante su huida, el procesado fue perseguido por su empleador y una multitud, hasta que fue interceptado y arrestado por una patrulla policial.