Algunos se preguntaban si alguna vez veríamos una mejor temporada de Aaron Judge que su espectacular y memorable campaña del 2022, cuando fue Jugador Más Valioso de la Liga Americana tras superar el récord de jonrones en una temporada de la Liga Americana que Roger Maris mantuvo durante 61 años, al tiempo que impulsaba casi en solitario a los Yankees a la postemporada.
Luego llegó la impresionante actuación del capitán en el 2024. En lugar de repeticiones borrosas en blanco y negro de los cuadrangulares de Maris, hubo videos en alta definición de lo que, estadísticamente, es la mejor temporada ofensiva de un bateador derecho desde 1900, lo que le valió a Judge, de manera unánime, su segundo premio a JMV.
“Creo que cada año trato de mejorar y ser mejor”, dijo Judge. “Intento reflexionar sobre lo que salió bien, lo que no salió bien, en qué podemos mejorar. ¿Qué ayudará a que el equipo llegue a la meta al final del año? Una de las cosas que analicé del 2022 al 2023 fue que quería impulsar más carreras. Ésa es la clave del juego y si anotas más carreras que tu oponente, vas a ganar muchos juegos”.
Estableciendo marcas personales en promedio de bateo (.322), porcentaje de embasarse (.458), slugging (.701), OPS (1.159), hits (180), dobles (36), empujadas (144), bases por bolas (133) y partidos disputados (158), Judge fue el motor que llevó a los Yankees a su primera Serie Mundial desde el 2009. Conectó 58 cuadrangulares, la mayor cantidad en las Grandes Ligas.
Su OPS+ de 223 en el 2024 fue el más alto registrado por un bateador derecho en más de un siglo (mínimo 400 visitas al plato). Sin embargo, el premio JMV tuvo un sabor agridulce para Judge, ya que tuvo dificultades en la postemporada y cometió un error costoso en el decisivo Juego 5 de la Serie Mundial contra los Dodgers.
Judge afirma que quedarse corto en el Clásico de Otoño “se quedará conmigo hasta que muera”, ya que siempre ha valorado los logros del equipo por encima de todo.
No es de extrañar, entonces, que Judge fuera nuevamente uno de los primeros jugadores en llegar al complejo primaveral del club, con una breve pausa en enero cuando él y su esposa, Samantha, dieron la bienvenida a su primer hijo. Con el dominicano Juan Soto mudándose a Queens, la próxima campaña marcará el regreso de Judge al jardín derecho, luego de jugar mayormente en el central en el 2024.
Se espera que Cody Bellinger, adquirido desde los Cachorros en diciembre, reciba la mayor parte de sus innings defensivos en el bosque central, aunque el manager Aaron Boone dijo que tiene previsto explorar la versatilidad defensiva de Bellinger durante la campaña.
“Le dije [a Boone] que donde necesite que juegue, jugaré”, aseguró Bellinger. “Ya sea en el jardín izquierdo, el central o si Judge tiene un día como bateador designado, jugaré en el derecho. Si me necesitan en la primera base, jugaré en la primera base. Me gusta hacer esas cosas. Creo que ayuda a que los equipos en los que estoy ganen”.
El JMV de la Liga Nacional en el 2019 y Novato del Año del Viejo Circuito en el 2017 con los Dodgers, Bellinger vio una disminución en sus números en el 2024, su segunda temporada con los Cachorros. En 130 encuentros, registró una línea ofensiva de .266/.325/.426 con OPS+ de 108, además de 23 dobles, 18 vuelacercas y 78 remolcadas.
Los Yankees creen que Bellinger, un bateador zurdo, encaja perfectamente en el Yankee Stadium, donde sus números de poder podrían volver a niveles anteriores. En sus primeras tres campañas con Los Ángeles, Bellinger promedió 37 jonrones por año. Además, tiene ADN de Yankee: Su padre, Clay, fue una valiosa pieza de la banca en los equipos de la dinastía a finales de los años 90.
“Nunca sabes qué traerá el futuro. Trato de no fijarme metas en números”, aclaró Bellinger. “Sólo quiero salir y jugar el mejor béisbol que pueda: Defendiendo, corriendo las bases y ayudando al equipo a ganar”.
Hay un camino despejado para que el principal prospecto de los Yankees, el dominicano Jasson Domínguez, se gane un puesto de titular en el jardín izquierdo, donde tuvo dificultades defensivas tras ser subido en septiembre.
“El Marciano” demostró su potencial en ocho partidos al final del 2023, en la que conectó cuatro jonrones (el primero ante Justin Verlander en Houston), antes de que una lesión en el codo que requirió de la cirugía Tommy John terminara abruptamente con su año.
Domínguez bateó apenas .179 (10 hits en 56 turnos) en 18 choques la campaña pasada, por lo que los encargados de tomar decisiones optaron por la defensa más confiable de Alex Verdugo durante los playoffs. Domínguez, un jardinero central natural, ha estado trabajando en el bosque izquierdo con el coach de los jardines, su compatriota Luis Rojas, durante las últimas dos semanas, y seguirá haciéndolo a lo largo de la primavera.
“Es un muchacho joven que todavía tiene que salir y ganarse el puesto”, apuntó Boone. “No ha jugado tanto béisbol como otros, considerando lo rápido que ha llegado a las Grandes Ligas y el éxito que todos hemos visto que puede tener. Creo que todos aquí reconocen lo talentoso que es. Me encantaría que se asegurara el puesto y lo hiciera suyo, y mi expectativa es que lo logrará”.
Trent Grisham regresa para su segunda temporada con los Yankees en un rol de suplente. Grisham bateó para .190 (34 hits en 179 turnos) con nueve vuelacercas y 31 carreras impulsadas tras ser adquirido desde los Padres en el canje por Soto.
También en la competencia estará el venezolano Everson Pereira, quien forma parte del roster de 40 jugadores y se ha destacado por su gran talento. Se dice que Pereira está completamente recuperado, luego de someterse a una cirugía en un codo que puso fin a su temporada en junio pasado.