La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió este martes una alerta por el hallazgo de jarabes para la tos adulterados con «cantidades inaceptables» de dietilenglicol y etilenglicol, potencialmente tóxicos y letales, en Islas Marshall y Micronesia, dos estados del Pacífico.
La alerta es similar a otras tres emitidas en los últimos seis meses por otros jarabes adulterados en Indonesia, Gambia y Uzbekistán, donde se registraron al menos 300 muertes (la mayoría niños menores de cinco años) relacionadas con el consumo de estos productos.
En este último caso, donde por ahora la OMS no ha informado de posibles víctimas, las adulteraciones se descubrieron en el jarabe Guaifenesin, elaborado por la firma india QP Pharmachem y distribuido por la compañía Trillium Pharma, también del país asiático.
La OMS advirtió que el jarabe podría haberse comercializado en otros países de la región Asia-Pacífico y de forma informal incluso a otras regiones.
«El dietilenglicol y el etilenglicol son tóxicos para los humanos y pueden ser mortales», recordó la OMS en su alerta, subrayando que entre los síntomas ligados a su consumo figuran dolores abdominales, vómitos, diarrea, insuficiencias urinarias, dolores de cabeza e insuficiencia renal.
La primera alerta reciente por este tipo de jarabes adulterados se emitió en octubre de 2022 al hallarse en Gambia (donde se cree que causaron al menos 70 muertos), al mes siguiente hubo otra para Indonesia (con unos 200 fallecidos) y en enero de 2023 se publicó una para Uzbekistán, donde se han contabilizado al menos 21 decesos.
La alerta para Gambia afectaba a jarabes producidos por el laboratorio indio Maiden Pharmaceuticals, la de Uzbekistán para productos similares de la también india Marion Biotech y la de Indonesia se refería a productos de manufactura local, la mayoría por parte de la firma PT Afi Farma.