Los Dodgers presentaron el jueves en el Dodger Stadium a su más reciente adquisición estelar, Shohei Ohtani, quien llega al equipo con un contrato récord de 10 años y US$700 millones.
“No veo la hora de integrarme a los Dodgers”, expresó Ohtani a través de su intérprete Ippei Muzuhara. “Comparten la misma pasión que yo. Tienen una visión e historia en torno a ganar. Comparto los mismos valores. No veo la hora de unirme al equipo”.
La firma de Ohtani marcó la conclusión de la que quizás haya sido la agencia libre más esperada de la historia del béisbol, en la que abundó la especulación en medio de negociaciones herméticas que ofrecieron pocas pistas al mundo sobre los deseos de la superestrella.
“Honestamente, fue genial poder hablar con cada uno de los equipos con los que me reuní”, dijo Ohtani, añadiendo que tomó la decisión de pactar con los Dodgers la noche anterior de publicar en Instagram con quién firmaría. “Fue una decisión muy, muy dura para mí. Pero al final del día, tenía que elegir un equipo y los Dodgers fueron mi decisión”.
Los Ángeles espera continuar añadiendo talento a su roster durante este invierno, al mantenerse en la puja por el derecho japonés Yoshinobu Yamamoto.
Aunque Ohtani no podrá lanzar en el 2024 mientras se recupera de una cirugía en el hombro, encajará muy bien en el puesto de bateador designado de los Dodgers la próxima temporada, uniéndose a una alineación que ya cuenta con dos de los finalistas para el Premio Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, Mookie Betts y Freddie Freeman.
Ohtani viene de su mejor temporada ofensiva, en la que encabezó la Liga Americana en jonrones (44) y porcentaje de embasarse (.412), y lideró las Mayores en slugging (.654) y WAR (10.0, según Baseball Reference).