El infielder Nasim Núñez, de los Miami Marlins, bateó un doble que empujó tres carreras para liderar el triunfo de la Liga Nacional 5-0 sobre la Liga Americana, el sábado en el T-Mobile Park de Seattle, y fue elegido Jugador Más Valioso (MVP) del Juego de Futuras Estrellas del 2023.
Núñez limpió las bases y luego se robó la antesala en su único turno en el encuentro. El jugador dedicó su actuación a uno de sus abuelos, José, quien falleció el año pasado.
“Él está sonriendo desde allá arriba. Lo que ocurrió en este juego y todo lo que haga en el futuro en el béisbol se lo dedicaré a él. Era mi mejor fanático”, dijo Núñez.
Núñez, quien nació en el Bronx, Nueva York, y creció en Georgia, es hijo de un inmigrante dominicano y juega como nativo con los Tigres del Licey en la liga invernal. Es el primer miembro de los Marlins y el tercer dominicano (Alfonso Soriano en 1999 y José Reyes en 2002) que conquista el trofeo de MVP del Juego de Futuras Estrellas, que fue creado en 1999.
El prospecto número 20 en la finca de los Marlins es uno de los mejores torpederos defensivos y más veloces jugadores en las ligas menores. Núñez, quien fue reclutado por Miami en la segunda ronda del Draft de MLB del 2019.
Núñez batea .231, pero se ha robado 164 bases en 195 intentos en 302 juegos como profesional. Este año tiene 33 estafas en 36 intentos en Doble A. Para acelerar su carrera, planea jugar en la pelota dominicana el próximo invierno.
“Quiero jugar con Licey este año. Estoy claro que eso tendrá que ser aprobado por los Marlins, pero quiero hacerlo. Me podría ayudar mucho”, dijo.
El Juego de Futuras Estrellas fue diseñado por la oficina del comisionado de Grandes Ligas hace 24 años, para mostrar a los aficionados el mejor talento de las ligas menores en el gran escenario de las festividades del Juego de Estrellas.
En sus primeras 20 ediciones enfrentó a Estados Unidos contra un seleccionado del resto del Mundo. Estados Unidos dominó esa fase 13-7. La fórmula Liga Americana contra Liga Nacional inició en el 2019 en Cleveland. Desde entonces, la Liga Nacional domina 2-1 con un empate.