El economista Miguel Collado di Franco criticó que se recurra al incremento del gasto público para aumentar el asistencialismo y el clientelismo con los programas de transferencias monetarias por parte del gobierno como forma de reducir los niveles de pobreza.
El vicepresidente ejecutivo del CREES sostiene que la mejor manera de enfrentar la pobreza y la marginalidad es creando las condiciones para que haya más inversión privada, la cual genera empleos de calidad, y se crea un círculo virtuoso de la economía.
“Es que el mismo Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, que ya va a desaparecer como tal por la fusión, cuando hace los análisis de la tasa de pobreza, te pone qué porcentaje provino de las transferencias, y es considerable”, recordó Collado di Franco.
Dijo que eso implica que “el propósito es seguir gastando más y cubrir la deficiencia que tenemos de no poder generar bienestar con el crecimiento económico, porque es un crecimiento basado en poco valor agregado, con un componente importante del mismo gasto del gobierno”.
“También tenemos una economía informal no estudiada, muy bien de todo tipo de cosas que pueden estar sucediendo ahí, que te ayudan a incidir en las cifras del Producto Interno Bruto, entonces lo que necesitamos es lo que pasó en la década de los 90, y no podemos cansarnos de decir que la República Dominicana necesita una serie de reformas estructurales para poder competir”, señaló.
Lamentó que, existiendo todas las condiciones ideales para hacer una serie de reformas, entre ellas la tributaria, no se den los pasos necesarios a su concretización por no querer asumir el costo político, o en el peor de los casos, esperar a que el país se encuentre en una crisis para tener que implementarlas por causas de fuerza mayor.
Miguel Collado también criticó que desde septiembre del 2023 hasta el mismo mes del presente año el gobierno haya agregado 27,000 empleados públicos, lo que implica 100 empleados diarios, en promedio, conforme a los datos de la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales.
Dijo que el clientelismo se empeora con la decisión de las autoridades de disponer cerca de cinco mil millones de pesos para entregar tres millones de bonos navideños de RD$1,500 a igual número de beneficiarios.
Dice la población siente alimentos están caros porque después de la pandemia el costo de la vida se ha disparado en un 25%
Pese a que el Banco Central sostiene que el índice de precios al Consumidor está en el límite inferior del rango meta de 4±1%, comerciantes y amas de casa viven manifestando quejas por las alzas de los productos de la canasta alimenticia. Frente a esa contradicción, el economista Miguel Collado di Franco tiene una explicación.
"La inflación", la firma encuestadora Ipsos publicó recientemente los resultados de una encuesta sobre la percepción de los dominicanos de la economía en Navidad, y casi dos tercios de la población dijo que percibe que el costo de la vida es mayor que el del pasado año, y no nos debe sorprender porque, aunque el ritmo de crecimiento de los precios se haya desacelerado este año, eso no quiere decir que no siga creciendo el costo de la vida en el país”, explicó el vicepresidente del CREES.
Agregó que cuando se mira la inflación subyacente, que excluye alimentos y energía porque son más volátiles, se puede ver que desde enero a noviembre se ha mantenido estable en 4%, aunque en el último mes se puede redondear a 3.9%. Eso implica que, aunque el IPC se ha mantenido en el rango meta, no quiere decir que es lo mejor para la población, porque lo ideal sería acercarse lo más posible a lo que se tenía antes de la pandemia.
“Ya llevamos 54 meses con esa inflación subyacente por encima de 3.5%, cuando los cinco años antes de la pandemia andaba en algo más del 2%, lo que implica que tenemos casi el doble, y eso ha llevado a tener un costo de la vida con un 25% más alto que el de la prepandemia”, explicó el profesional de la economía.
Insistió en que lo que ha sucedido en este año es que se ha reducido el ritmo de crecimiento de los precios, pero el valor del dinero, de la moneda, lo que se puede comprar con ella va disminuyendo cada año.
Sobre el crecimiento de la economía que ha reportado el Banco Central, que oscilará entre 5.0 y 5.1% en el presente año, lo que hay que ver es cómo percibe la gente en su bienestar qué tipo de crecimiento es ese y qué tanta incidencia tiene.
Miguel Collado definió el 2024 como un año perdido en lo que tiene que ver con la no implementación de las reformas que requiere la economía, específicamente la reforma tributaria, y dijo esperar que en el año que se avecina las mismas puedan ser discutidas, consensuadas y aprobadas, para beneficios del presente y futuro de la República Dominicana.