Los Nuggets de Denver dominan la gran final de la NBA por 1-0 y este domingo saldrán a la duela con el objetivo de asestar una nueva estocada a los Heat de Miami, que necesitan reaccionar de inmediato para elevar sus opciones de coronación.
Denver jamás conquistó el título en el torneo élite del baloncesto de Estados Unidos. Ahora, de la mano del magnífico pívot serbio Nikola Jokic, están encaminados hacia el trono y realmente parecen indetenibles.
En el primer duelo de la serie, los Nuggets arrollaron a los Heat, sin piedad, al punto que el marcador 104-93 parece corto para lo ocurrido en la cancha del Ball Arena o Pepsi Center de Denver, como prefiera llamarle.
Después de barrer por 4-0 a los Lakers de Lebron James en la etapa anterior, Jokic y compañía destruyeron a Miami en el arranque de la Final.
El balcánico marcó un triple doble -uno más- de 27 puntos, 10 rebotes y 14 asistencias.
Hoy, en Denver, los especialistas y las casas de apuestas otorgan nuevamente, y con amplitud, el cartel de favorito a los Nuggets.
Sin embargo, los Heat de Miami jugaron toda la postemporada como cenicientas y sorprendieron a varios gigantes de NBA, el último de ellos fueron los Celtics de Boston, en un enfrentamiento fratricida que se decidió en el séptimo y último juego.
Jimmy Butler y Bam Adebayo tendrán que buscar las vías para mejorar sus prestaciones en la altura de Denver y contrarrestar la artillería de sus adversarios, de las más poderosas y eficientes del mundo actual.
Miami, campeón en 2006, 2012 y 2013, persigue su cuarto anillo de la historia, algo que ahora mismo los expertos consideran una quimera.
En una muestra de las cuatro temporadas más recientes, podemos observar que Miami perdió siete de nueve partidos contra Denver, incluidos los tres de la campaña 2022-2023.
O sea, las opciones del equipo del sur de la Florida son escasas ante los Nuggets, pero el deporte está repleto de épica y a eso apelarán los Heat.