La NCAA revocó el viernes la elegibilidad de seis jugadores de baloncesto universitario masculino como resultado de tres casos separados de apuestas deportivas que involucraron a una universidad de una conferencia importante y acusaciones de jugadores que se dejaron ganar para perder por más puntos que el margen de puntos.
El Comité de Infracciones de la NCAA publicó las conclusiones de una investigación que determinó que Chatton “BJ” Freeman en Arizona State; Cedquavious Hunter, Dyquavian Short y Jamond Vincent en Nueva Orleans y Donovan Sanders y Alvin Stredic en Mississippi Valley State manipularon sus actuaciones para perder partidos, no cubrir las líneas de apuestas o no garantizar que se alcanzaran ciertas apuestas especiales, o proporcionaron información que permitió a otros hacerlo durante la temporada regular 2024-25.
Este acontecimiento se produce en un contexto de creciente escrutinio del mundo del deporte en torno a las apuestas. Casi treinta y seis personas fueron arrestadas el mes pasado, entre ellas un jugador y un entrenador de la NBA , por su presunta participación en diversas actividades de apuestas ilícitas, según informaron las autoridades federales. Esta misma semana, el presidente y director ejecutivo de la UFC, Dana White, declaró haber contactado con el FBI en relación con un combate que involucró patrones de apuestas inusuales.
Por su parte, la NCAA anunció el mes pasado que investigaba al menos a 30 jugadores, actuales o antiguos, por presuntas apuestas ilegales. Asimismo, la NCAA sancionó en septiembre a tres jugadores de baloncesto universitario por apostar en sus propios partidos en Fresno State y San Jose State.
Arizona State es la única universidad de una conferencia importante involucrada en los recientes anuncios. Freeman se vio implicado en la investigación cuando la NCAA revisó los mensajes de texto intercambiados entre él y Mykell Robinson, jugador suspendido en septiembre y exalumno de Fresno State. Los registros del teléfono de Robinson indicaron que, en cuatro ocasiones distintas entre noviembre y diciembre de 2024, Freeman le proporcionó información a Robinson, quien apostaba por Freeman a través de cuentas de deportes de fantasía.
Freeman también proporcionó información a sabiendas en al menos dos ocasiones a su entonces novia, quien también apostaba por Freeman.
En una ocasión, Freeman le proporcionó información a Robinson para apostar a que Freeman cometería más pérdidas de balón de las previstas contra Florida el 14 de diciembre de 2024, según la NCAA. Arizona State llegaba al partido con un récord de 8-1, tras haber vencido recientemente a dos equipos que posteriormente participarían en el Torneo de la NCAA. Los Sun Devils perdieron 83-66 contra los Gators, novenos en la clasificación, y terminaron la temporada con un récord de 13-20. Freeman cometió una pérdida de balón en todo el partido.
La Universidad Estatal de Arizona declinó hacer comentarios sobre el caso cuando fue contactada por The Associated Press.
Las infracciones cometidas por Hunter, Short y Vincent en Nueva Orleans salieron a la luz después de que la NCAA recibiera un aviso sobre manipulación de partidos. La NCAA informó que un estudiante-atleta escuchó a los tres jugadores hablar sobre una tercera persona que había hecho una apuesta en su partido contra McNeese State el 28 de diciembre de 2024. Nueva Orleans perdió 86-61.
Ese mismo estudiante-atleta denunció que, durante un tiempo muerto cerca del final del partido, Short le ordenó que no anotara más puntos. Nueva Orleans suspendió a los tres estudiantes-atletas por el resto de la temporada mientras investigaba las acusaciones.
La investigación de la NCAA demostró que los tres jugadores manipularon su rendimiento en siete partidos entre diciembre y enero para perder por más puntos que el margen de puntos previsto para ese partido.
La presidenta de la universidad de Nueva Orleans, Kathy Johnson, afirmó que el personal de la universidad no estaba al tanto de las infracciones.
«La Universidad de Nueva Orleans se rige por los más altos estándares de integridad, carácter y deportividad, y agradecemos el riguroso proceso de la NCAA. Mantenemos nuestro firme compromiso de cumplir con todas las normas de la NCAA y de la conferencia», escribió Johnson en un comunicado a la AP. «Continuaremos colaborando estrechamente con la NCAA y nuestros socios de la conferencia para garantizar que todos los estudiantes-atletas comprendan y cumplan con las expectativas de la participación en el deporte universitario».
La NCAA contactó con un servicio de control de integridad para revisar los partidos de Mississippi Valley State después de que una red de apuestas de la NBA relacionada, pero independiente , descubierta a principios de este año, mostrara posibles vínculos con el baloncesto universitario, incluida la propia universidad.
El servicio indicó que las tendencias de apuestas para los partidos de Mississippi Valley State contra Alabama A&M el 6 de enero eran sospechosas. Mississippi Valley State perdió 79-67.
Durante una entrevista con la NCAA, un estudiante-atleta de baloncesto masculino dijo que antes del partido del equipo del 21 de diciembre de 2024, escuchó a Sanders hablando por teléfono con una tercera persona desconocida sobre “dejarse ganar el partido”.
Sanders le pidió al estudiante-atleta que participara en la llamada porque la tercera persona le había dicho a Sanders que esa persona tenía la intención de apostar en el partido y quería saber si otro de los compañeros de equipo de Sanders participaría en el plan.
El estudiante-atleta negó haber alterado su rendimiento o haber recibido dinero de Sanders ni de ninguna otra persona. Sanders le envió un mensaje de texto al mismo estudiante-atleta después del partido y le pidió que borrara los mensajes.
Durante una segunda entrevista, Sanders no pudo explicar la versión del estudiante-atleta sobre los hechos ni los mensajes de texto. Sin embargo, sí afirmó que él y Stredic recibieron una oferta de dinero para dejarse ganar en el partido del equipo del 6 de enero por parte de otra persona anónima, quien les indicó que jugaran mal en la primera mitad.
El personal encargado de hacer cumplir la ley demostró que Sanders proporcionó información a sabiendas a un tercero con fines de apuestas deportivas para dos partidos, y Stredic hizo lo mismo para un partido.
Sanders y Stredic ya no están matriculados en la universidad, según un comunicado de Mississippi Valley State.
“La universidad se toma estos asuntos muy en serio y los utiliza como una oportunidad para reforzar ante todos los estudiantes-atletas la importancia de cumplir con las regulaciones de la NCAA en materia de apuestas deportivas, que existen para proteger la integridad del deporte universitario y el bienestar de los estudiantes-atletas”, señala el comunicado.
Estos anuncios se producen tras la posible autorización de la NCAA para que los estudiantes atletas y el personal apuesten en deportes profesionales . La medida, inicialmente aprobada por las tres divisiones y prevista para entrar en vigor el 1 de noviembre, fue aplazada a finales del mes pasado por la Junta de la División I hasta el 22 de noviembre.
Una norma poco utilizada otorga a cada universidad de la División I un plazo de 30 días para votar la revocación de una propuesta si esta es aprobada por menos del 75% de su gabinete. Incluso si la norma se aprueba, los jugadores no pueden apostar en ningún deporte universitario.
