La jueza Esmirna Gisselle Méndez, del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, varió este martes la medida de coerción impuesta al mayor general Adán Cáceres Silvestre, y en ese sentido ordenó levantarle la prisión domiciliaria y que se le retire el grillete electrónico al principal imputado en el caso de corrupción denominado Coral.
La magistrada acogió el pedimento de la defensa del exjefe de seguridad del expresidente Danilo Medina, sin embargo decidió mantener la garantía económica y el impedimento de salida como medida de coerción.
Cristian Martínez, abogado defensor de Cáceres, dijo que hoy se hizo lo que debió hacerse hace mucho, que era cesar una situación que se había prolongado de una manera «exagerada».
«Al día de hoy tiene tres años en estado de prisión preventiva, frente a su posición en donde el Ministerio Público no ha presentado una sola prueba de nada ; ni una prueba de que se va a fugar, ni de riesgo. Una persona que tiene una conducta en todo este proceso adecuada, a lo que se exige a un imputado», dijo Martínez.
Al inicio del proceso, la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional le impuso 18 meses de prisión preventiva que cumplió el acusado en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres, de San Cristóbal.
Cáceres Sivestre, exjefe del cuerpo de Seguridad Presidencial (Cusep), es acusado de dirigir el entramado de corrupción que desfalcó al Estado con más de 4,500 millones.