Cuando se menciona a leyendas como
Barry Bonds y
Bobby Bonds, se habla de una categoría exclusiva en la historia del béisbol, hoy,
José Ramírez se suma una vez más a esa conversación.
El estelar dominicano de los
Guardianes de Cleveland firmó otro capítulo histórico al alcanzar por
séptima vez en su carrera una campaña con
al menos 20 cuadrangulares y 20 bases robadas, hazaña que logró el lunes con un
bambinazo de tres carreras en la primera entrada ante Tomoyuki Sugano, en la victoria 10-5 sobre los Orioles en Progressive Field.
Un club selecto: 20 HR / 20 BR
Ramírez se convirtió en
el sexto jugador en la historia de MLB con siete temporadas 20-20, igualando a figuras como
Carlos Beltrán y
Eric Davis. Solo tres nombres superan su marca:
- Barry Bonds – 10 temporadas
- Bobby Bonds – 10 temporadas
- Bobby Abreu – 9 temporadas
- Carlos Beltrán, Eric Davis, José Ramírez – 7 temporadas
Con el paso que lleva, no sería una sorpresa que Ramírez continúe escalando esta lista y termine en la cima junto al legendario dúo Bonds.
Durabilidad y consistencia a nivel élite
Lo que hace aún más impresionante la hazaña de Ramírez es su
extraordinaria consistencia física y rendimiento sostenido. Ha disputado al menos
152 partidos en cada una de las últimas cuatro temporadas, y en 2025 está en camino de repetir.
En esta campaña, alcanzó el 20-20 en apenas
96 juegos, pese a haber lidiado con tres lesiones menores esguince en la muñeca derecha (29 de marzo), esguince en el tobillo derecho (2 de mayo) y bolazo en el antebrazo derecho (26 de junio)
En cada ocasión, regresó a la acción al día siguiente, reafirmando su
resistencia física y compromiso con el equipo.
Ramírez no solo fue protagonista con su cuadrangular, sino que encendió a unos Guardianes que siguen en ascenso. Cleveland ha ganado
nueve de sus últimos 11 partidos, después de una racha de 10 derrotas consecutivas entre el 26 de junio y el 6 de julio. El lunes, el equipo conectó
tres jonrones, incluyendo los de
Bo Naylor y
Kyle Manzardo, igualando su marca colectiva de la temporada.
A pesar de dejar
15 corredores en base (su cifra más alta del año) y batear apenas de 20-3 con hombres en posición anotadora, los batazos oportunos –y la presencia de su líder dominicano– marcaron la diferencia.
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