La región del Caribe vive una creciente escalada de tensión geopolítica, en la que Estados Unidos, con República Dominicana como “aliado pivote”, ha intensificado su presencia militar y sus operaciones conjuntas para el control marítimo y la interdicción de redes de narcotráfico que operan desde Sudamérica, incluyendo Venezuela.
En ese sentido tanto la nueva embajadora de Estados Unidos, Leah Campo, como una comisión bipartidistas de legisladores estadounidenses coincidieron en señalar que en las actuales coyunturas República Dominicana es un aliado clave para su país.
Ambos países han renovado recientemente un memorando de entendimiento para fortalecer el intercambio de inteligencia y datos de vigilancia sobre espacios aéreos, marítimos y terrestres. El acuerdo incluye el Sistema Cooperativo de Integración de Información Situacional (CSII), una plataforma compartida de radares y sensores para coordinar operaciones conjuntas.
Este fortalecimiento coincide con un despliegue notable de la Armada de EE. UU., incluyendo el portaaviones nuclear USS Gerald R. Ford y su grupo de ataque, junto a buques de escolta, aeronaves de vigilancia y operaciones especiales, en el marco de acciones que, según Washington, buscan “detectar, vigilar e interrumpir actividades ilícitas” en el Caribe.
Visita de congresistas
Una delegación bipartidista del Congreso de los Estados Unidos visitó al presidente Luis Abinader y a los cabezas de varias entidades, a quienes le manifestaron la importancia que tiene para su país República Dominicana como socio estratégico para la lucha contra el narcotráfico y la seguridad en el Caribe.
El grupo, encabezado por Brian Mast, congresista republicano por Florida y presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, sostuvo que la cooperación con República Dominicana es esencial para contener amenazas regionales, fortalecer la gobernanza democrática y contrarrestar el narcotráfico.
“República Dominicana es un aliado fundamental para la seguridad del hemisferio”, declaró Mast, señalando que los avances logrados en materia de seguridad y control fronterizo han convertido al país en un punto de referencia dentro del Caribe.
El equipo visitante estuvo integrado por los congresistas Bill Huizenga (Michigan), Jefferson Shreve (Indiana), Ryan Mackenzie (Pensilvania), Michael Baumgartner (Washington), Randy Fine (Florida), Ami Bera y Jimmy Panetta (California).
La delegación estuvo acompañada por la embajadora estadounidense Leah Francis Campos, quien ha reiterado que el país es “un socio indispensable en la región” por su cooperación en materia de seguridad, migración, comercio y lucha contra el narcotráfico.

Los legisladores iniciaron su agenda con una reunión en el Palacio Nacional con el presidente Luis Abinader, en la que participaron también el canciller Roberto Álvarez; el ministro de Defensa, teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre; la procuradora general Yeni Berenice Reynoso; el director de la DNCD, vicealmirante José M. Cabrera Ulloa; el director de Migración, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester; y el general de brigada piloto Mao Gómez, a cargo de la Fuerza de Tarea de apoyo a la misión de seguridad en Haití.
En ese encuentro se pasó balance a los esfuerzos conjuntos para enfrentar el narcotráfico, la criminalidad transnacional, el tráfico de armas y Haití.




