La economía de República Dominicana será una de las tres que más crecerán en 2023 en la región, un 4,6 por ciento, según las previsiones divulgadas este jueves por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Este organismo de Naciones Unidas con sede en Santiago de Chile precisó en un comunicado que República Dominicana presenta la misma tasa de crecimiento que Panamá (4,6 %), mientras Venezuela aparece en las estimaciones como el país de Latinoamérica con el mayor avance, un 5 %.
Tras estas economías, previsiblemente se situarán Paraguay (4,2 %), las islas del Caribe (3,5 %), Guatemala (3,2 %), Honduras (3 %), Costa Rica (2,7 %) y Nicaragua (2,3 %),
En el medio de la tabla de la proyección de crecimiento de la CEPAL se encuentran El Salvador, Uruguay, Perú, Ecuador y Bolivia, con una estimación del 2 %, seguidos de Cuba y México, ambos con un alza del 1,5 %.
En la cola, pero aún con cifras positivas, están Colombia (1,2 %) y Brasil (0,8 %), mientras que Chile (-0,3 %), Haití (-0,7 %) y Argentina (-2 %) son los únicos países que decrecerán este año.
A nivel global, la CEPAL redujo levemente su proyección de crecimiento del PIB regional para 2023 del 1,3 % estimado el pasado diciembre a un 1,2 %, debido principalmente a “crecientes incertidumbres externas y restricciones internas”.
De acuerdo con esta institución, l escenario es “complejo” porque, a las alzas en las tasas de interés a nivel mundial, “se agregaron las turbulencias financieras observadas a comienzos de marzo”, como la quiebra de distintos bancos, entre ellos el Silicon Valley Bank, en Estados Unidos.
“La proyección de crecimiento de 2023 está sujeta a riesgos a la baja ante la posibilidad de que resurjan y se acentúen las turbulencias del sistema bancario global, lo que resultaría en un endurecimiento más persistente de las condiciones financieras mundiales”, alertó.
Para la CEPAL, la región vuelve a tener este año un espacio “limitado” para la política fiscal y “no es de esperar que se generalice todavía un ciclo de relajamiento monetario en la región”.
La inflación en América Latina y el Caribe, agregó, “muestra una tendencia a la baja y, si bien se espera que podría estar próxima la conclusión del proceso de alzas de tasas de interés en varios países de la región, los efectos de la política restrictiva sobre el consumo privado y la inversión se harán sentir con más fuerza este año”.
Latinoamérica, la región más desigual del mundo y la más afectada por la pandemia, creció un 6,9 % en 2021, como rebote tras el desplome del 6,8 % registrado en 2020, la mayor recesión en 120 años.
La desaceleración en la zona comenzó en el segundo semestre de 2022, que cerró con un crecimiento estimado del 3,7 %, según CEPAL, que aún no ha entregado la cifra final al respecto.