La noche del miércoles en el PNC Park prometía ser un duelo de fenómenos, con Paul Skenes y los Piratas cara a cara vs. Shohei Ohtani y los Dodgers. Y así fue.
Aunque los Piratas terminarían ganando 10-6 – en gran parte gracias a una segunda entrada de siete carreras – ese enfrentamiento fue el punto central de la noche. Skenes, el principal prospecto entre los lanzadores de su generación, y el "unicornio" Ohtani en contienda por su tercer premio Jugador Más Valioso, nunca habían chocado entre sí y ambos jugadores ganaron cada uno decisivamente una batalla en sus primeros dos enfrentamientos.
“Ohtani y Skenes es lo que realmente quieres ver”, dijo Nick Gonzales, quien empujó cuatro carreras en la victoria. “Como jugador, también. Estamos igual de ansiosos por ver a esos muchachos enfrentarse tanto como los aficionados. Es realmente genial verlo”.
En el primer inning, Skenes atacó a Ohtani directamente con fuego, retándolo con rectas de 101.3, 100.1 y 100.8 mph. Ohtani abanicó en blanco ante los tres lanzamientos.
En el tercer acto, Ohtani tuvo otra oportunidad, esta vez con Mookie Betts en primera. Skenes consiguió hacerlo abanicar la brisa dos veces en ese turno, pero con la cuenta llena, Ohtani conectó una bola rápida a 100.1 mph y la envió más allá de la pared del jardín central para un jonrón de dos carreras.
Los dos se enfrentarían una vez más en el quinto, donde Ohtani bateó un rodado hacia la derecha apuntándose un sencillo, pero Skenes dejó las bases llenas para completar su noche de cinco innings completos con tres carreras permitidas y ocho ponches.
Fue el choque entre la principal superestrella del juego y el más prometedor de los lanzadores en ascenso. Si querías ver algo increíble, ambos jugadores entregaron todo lo que tenían.
“Me gusta llamarlo grande contra grande, porque obviamente lo vencí un par de veces antes”, dijo Skenes. “Creo que fue el lanzamiento correcto para lanzarle allí, pero simplemente es un jugador bastante bueno. Cosas como esas van a suceder”.
Skenes no llegó al primer turno de la noche pensando que iba a lanzar tres rectas, pero después de observar cada swing de Ohtani, siguió atacándolo con su poderosa cuatro costuras. Esa visita al plato marcó la primera vez en la era del seguimiento de lanzamientos (desde 2008) en la que un pitcher abridor registró un ponche con tres envíos que superaron las 100 mph e indujeron un swing en blanco.
“Creo que una cosa que estamos aprendiendo sobre él es que no tiene miedo de enfrentarse a la gente”, mencionó el manager de los Piratas Derek Shelton. “Salió desde el principio a atacar a una alineación realmente buena. Nuevamente, los tres primeros muchachos de ellos tienen todos trofeos de JMV”.
En el segundo turno al bate, Skenes nuevamente atacó con muchas rectas, todas las cuales registraron 99.5 mph o más, pero Ohtani finalmente logró conectar un lanzamiento de alta velocidad.
“Sí, tienes que quitarte el sombrero”, reconoció Skenes. “Es un buen jugador. Cosas así van a suceder. También tienen otros jugadores realmente buenos, y francamente, por eso jugamos el juego, por duelos como ese. No estoy feliz de haberlo permitido (el jonrón), pero es parte del juego”.
Skenes compartió con los miembros de los medios el martes que, siendo bateador y lanzador cuando era joven, idolatraba lo que Ohtani era capaz de hacer. El miércoles, Ohtani le devolvió el cumplido.
“Sus pitcheos en sí son muy buenos”, aseguró Ohtani. “Como vieron en el primer turno al bate, realmente no pude hacer buenos swings".
Skenes lanzó 18 rectas que registraron 100 mph o más, superando su propia marca de 17 el 11 de mayo como la mejor para cualquier abridor en un juego este año. Pero esa no fue la única razón por la que consiguió 11 swings en blanco y seis ponches con ella.
“Más que la velocidad, realmente es el ángulo y el punto en el que suelta la pelota”, explicó Ohtani.
La del miércoles no fue la mejor apertura de Skenes, pero ciertamente fue su prueba más difícil en lo que respecta a la alineación del rival. El joven derecho cree que hay margen para mejorar, y da miedo preguntarse hasta dónde puede llegar ese techo a medida que continúa madurando.
“Creo que lo más importante es que, mientras he estado aquí, realmente no hay un manual sobre lo que debo hacer. Estamos escribiendo mientras avanzamos”, acotó Skenes. “Me refiero a cómo tirar mis lanzamientos, dónde lanzarlos, cuándo lanzar cada uno de mis pitcheos, ese tipo de cosas. Solo estamos aprendiendo mientras avanzamos”.