Amnistía Internacional (AI) instó al presidente de República Dominicana, Luis Abinader, a que en su segundo debe priorizar el respeto a los derechos humanos y poner fin a las supuestas «políticas migratorias racistas», que garanticen el respeto a la dignidad humana e integridad física de migrantes haitianos y dominicanos de ascendencia haitiana.
«El inicio del nuevo gobierno debe traer un compromiso irrestricto para superar los retos en materia de derechos humanos que hemos denunciado y documentado en estos últimos meses. Es crucial que se establezcan políticas migratorias que garanticen el respeto a la dignidad y los derechos humanos de todas las personas», expresó Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
En un comunicado, destacó que desde 2022, República Dominicana se convirtió en el país que deporta más personas haitianas en movilidad, a pesar del llamamiento en noviembre de 2022 del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) a los Estados para detener los retornos forzados a Haití.
Amnistía Internacional dijo que ha constatado que muchas de estas expulsiones han sido colectivas, violando el principio de no devolución y el derecho de asilo de las personas haitianas.
«Dichas expulsiones colectivas son contrarias a las obligaciones internacionales de la República Dominicana porque no permiten una evaluación individualizada de las necesidades de protección de cada persona afectada, ni de los riesgos a los que se enfrentarían las personas al ser devueltas a Haití. Asimismo, son realizadas con operativos migratorios que perfilan y discriminan racialmente, faltando a la garantía del principio de igualdad y no discriminación», argumenta.
La organización aseguró haber recibido testimonios «alarmantes» de víctimas y organizaciones de la sociedad civil local, y examinó videos mostrando la forma discriminatoria y deshumanizada de los operativos migratorios, los traslados de las personas y las condiciones de los centros de detención.