Los Minnesota Timberwolves recibirán un duro golpe en el cierre de la temporada regular: Anthony Edwards ha sido suspendido para el partido del domingo frente a los Utah Jazz tras acumular su 18ª falta técnica de la temporada.
La sanción se produce luego de que Edwards discutiera con el árbitro Ray Akosta tras una falta señalada en el segundo cuarto del partido del viernes. La reacción del escolta fue suficiente para que se le marcara otra técnica, elevando su total a 18 en la temporada. Según las reglas de la NBA, tras alcanzar 16 faltas técnicas, los jugadores son suspendidos por un partido, y por cada dos faltas adicionales, se impone una nueva suspensión automática.
Aunque la NBA tiene la facultad de revisar y eventualmente anular faltas técnicas, rara vez lo hace, especialmente cuando no hay evidencia clara de error por parte del cuerpo arbitral. Incluso superestrellas como Luka Dončić o LeBron James han enfrentado suspensiones similares sin que sus apelaciones prosperen.
La baja de Edwards llega en un momento crítico. Los Timberwolves están inmersos en una apretada batalla por las posiciones de playoffs en la Conferencia Oeste. Con solo dos partidos por jugar, seis equipos están separados por apenas dos juegos entre las posiciones 3 y 8. Minnesota aún podría terminar con ventaja de local en la primera ronda o, en el peor de los casos, caer al play-in.
Sin embargo, el calendario juega a su favor. Tras una gran victoria sobre Memphis el jueves, los Wolves son el único equipo entre los contendientes que no enfrentará a rivales de playoffs en los dos partidos finales. Su último compromiso será ante unos Jazz con marca de 17-64, que ya están eliminados de la contienda.
Curiosamente, Edwards también fue suspendido por su 16ª falta técnica el pasado 28 de febrero, en otro enfrentamiento contra Utah. Aquella vez, los Timberwolves cayeron derrotados. Esta vez, buscarán un desenlace distinto sin su principal figura en cancha.
