Los cánticos bajaban desde las gradas la noche del miércoles, después de que Juan Soto había bateado su segundo jonrón del juego hasta las gradas del jardín izquierdo. Escuchando las sílabas de su nombre intercaladas con proclamaciones de “¡M-V-P!”, la superestrella dominicana de los Yankees se volvió hacia la pared y levantó ambas manos en alto.
Estos primeros meses con el uniforme de los Yankees han sido un sueño para Soto, y el ingrediente clave ha sido bloquear el ruido. No importa quién esté hablando sobre cómo podría lucir su contrato y su futuro, una conversación diaria en la ciudad en este momento, Soto ha podido concentrarse en ofrecer resultados.
“Es increíble”, dijo Soto después de su segundo juego de más de un bambinazo como miembro de los Yankees, ayudando a impulsar una victoria por 7-3 sobre los Marineros. “Todo lo que tengo que hacer es darme la vuelta y se vuelven locos. Sé que hay muchos dominicanos; todos quieren que los salude. Intento saludarlos a todos, pero también tengo que estar enfocado en el juego”.
Aaron Judge, por su parte, conectó su décimo cuarto cuadrangular, el tope en el equipo, antes de que Alex Verdugo agregara un bambinazo en la octava entrada, ayudando a los Yankees a conseguir su victoria número 34 del año, la mayor cantidad en la Liga Americana. Los aplausos también fueron fuertes para ellos dos, pero cada noche se ha convertido en un festival de amor total para Soto, con toda esa adoración representando una invitación para que se quede a largo plazo.
“Estoy disfrutando cada parte de esto”, siguió Soto. “Me divierto con esto. Nunca sabes cuánto tiempo va a durar así, así que intentas disfrutar cada segundo, empaparte de todo eso y seguir para adelante”.
El juego del miércoles marcó la tercera vez que Judge y Soto han conectado jonrones en el mismo desafío como compañeros de club. También lo hicieron el 24 de abril (contra los Atléticos) y el 8 de mayo (ante los Astros).
Como podrían haber esperado cuando hicieron el cambio de diciembre para juntar a los dos poderosos cañoneros, los Bombarderos han ganado esos tres juegos en los que ambos jonronearon. Judge dijo que el constante apoyo nocturno para Soto “me pone la piel de gallina”.
“Es increíble. Me encanta”, aseguró Judge. “Solo por el corto tiempo que he estado cerca de él, viéndolo trabajar en los entrenamientos de primavera y conociéndolo a él y a su rutina, y luego ver que esa rutina despega en el juego, es algo divertido de ver. Los fanáticos definitivamente están amando el espectáculo que está ofreciendo”.
Judge castigó a Bryce Miller con un jonrón de dos carreras en el primer episodio. Soto añadió un cuadrangular de dos rayas en el tercero, depositando su batazo en el bullpen visitante, antes de mandar un bambinazo solitario hacia las gradas del jardín izquierdo en el sexto.
Después de cada jonrón, Soto se reunió con el coach de bateo asistente Pat Roessler, examinando detenidamente la mecánica de su swing.
“Siempre es bueno irme por ese lado”, contó Soto sobre la importancia que tiene para él poder batear hacia la banda contraria. “Siempre digo, cuando estoy bateando bolas en esa dirección, significa mucho para mí. Eso te dice si mi swing está bien”.
Soto nunca ha tenido un juego de tres jonrones en las Grandes Ligas, y tuvo la oportunidad en el séptimo con las bases llenas. Pareciendo intentar conectar un cuadrangular, Soto se ponchó contra Cody Bolton.
“Estaba en su mente”, mencionó el manager Aaron Boone. “Creo que también lo intentó un par de veces. Siempre sientes que eso está en juego. Ha habido un par [de juegos] donde piensas, ‘Podríamos ver algo especial aquí’. Simplemente es un jugador especial y un swing especial”.
Soto confesó: “Creo que me pasé. Me emocioné demasiado”.
Eso no es así, al menos si le preguntas a su sección de fans en las gradas, o a cualquiera en el clubhouse.
“Nosotros sabemos quién es él”, dijo el zurdo cubano Néstor Cortés. “Es un muchacho que va a luchar en sus turnos al bate, y si cometes un error sobre el plato, lo pagarás. Eso es exactamente lo que ha pasado este año.
“... Viéndolo desde el otro lado del terreno, sabes lo bueno que es. Pero una vez que está de tu lado, el trabajo que realiza, lo joven que es y cuánto le importa lo que hace, es simplemente un factor diferente”.
Cortés ponchó a seis en cinco episodios sin permitir carreras, con tres hits y tres bases por bolas. Cortés mejoró a 3-1 con una efectividad de 1.12 en seis aperturas en casa esta temporada.
Cal Raleigh conectó un jonrón de tres rays contra Luke Weaver en el octavo, pero Verdugo respondió con un cañonazo de dos anotaciones en la parte baja de la entrada. Verdugo flexionó sus bíceps mientras comenzaba su trote alrededor de las bases, mirando directamente a Soto, a quien le pasó un brazo por encima del hombro mientras celebraban en el dugout.
“Todos saben lo buenos que son mis compañeros de equipo”, recordó Soto. “Realmente me han hecho sentir cómodo en esta alineación, en este clubhouse. Creo que han estado haciendo un gran trabajo por mí”.