El Ministerio Público de esta provincia logró una condena de 10 años de prisión en contra de un hombre que junto a otras dos personas atracó a punta de pistola a otros dos, quienes fueron despojados de una motocicleta, un celular y dinero en efectivo, en distintos hechos ocurridos el pasado año en el municipio Bayaguana.
El Tribunal Colegiado de Monte Plata dictó la sentencia condenatoria en contra de Raymer Rafael Hernández por perpetrar los hechos delictivos en perjuicio de Hipólito José y Francisco Familia Javier cuando ambos se encontraban en el municipio Bayaguana de esta provincia.
Hernández fue arrestado el 17 de julio de 2022 luego de haber cometido los atracos junto a las dos personas aún no identificadas.
El expediente detalla que el referido día el hoy condenado y las dos personas que le acompañaban, alrededor de las 9:15 de la noche, atracaron a Hipólito José, a quien a punta de pistola le sustrajeron un celular marca Samsung y la suma de RD$35 mil pesos en efectivo.
Detalla, que, ese mismo día, una hora después, aproximadamente a las 9:30 de la noche, fue atracado frente a su residencia Familia Javier, el cual fue despojado de la motocicleta marca Suzuki en la que se transportaba, así como de la suma de 40 mil pesos.
Ambos casos fueron denunciados ante el Ministerio Público y la Policía Nacional, quienes de inmediato iniciaron las pesquisas, logrando el apresamiento del acusado y procediendo con su sometimiento a la justicia en un proceso donde se aportaron a los jueces los elementos probatorios que les llevaron a dictar la sentencia condenatoria.
La acusación presentada por el procurador fiscal de este distrito judicial José del Carmen García Hernández fue acogida por las juezas Hilda Nieve Sánchez Luna (presidenta), Johanna Giselle Reyes Moquete (jueza miembro) y Carmen Daniela Araujo Rivas (jueza suplente), quienes dictaron la sentencia en sus atribuciones penales y en audiencia pública.
A partir de las pruebas aportadas por el Ministerio Público, el tribunal estableció que el procesado violó las disposiciones contenidas en los artículos 379 y 383 del Código Penal Dominicano, emitiendo la sentencia condenatoria, cuyo cumplimiento ordenó en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) de Monte Plata.