El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, del Partido Demócrata y el expresidente Donald Trump, del Partido Republicano, son los dos políticos más longevos que en la actualidad concentran la mayor atención del electorado norteamericano en los últimos 20 años.
Como van las cosas, parece que los estadounidenses tendrán que decidir nuevamente mediante el voto popular, cuál de los dos es el que va a dirigir los destinos de los EE.UU. desde la Casa Blanca a partir del 2024.
Las conductas personales de ambos líderes políticos están siendo seriamente cuestionadas por la opinión pública nacional e internacional, dejando entrever que no son los idóneos representantes de la sociedad norteamericana que siempre aspira a que sus gobernantes sean los más pulcros y honestos de la nación.
El presidente Biden, ha sido implicado de supuestamente haber recibido millones de dólares en sobornos de corporaciones extranjeras sin ninguna justificación, en un entramado de corrupción junto a su hijo Hunter, según denuncias de congresistas republicanos.
Estos están concentrados en acumular reportes bancarios y otros documentos como evidencias para iniciar un proceso de “Impeachment” contra el presidente demócrata.
En 2020, la imagen de Biden se vio empañada por acusaciones de delitos de agresión sexual contra una empleada del Congreso llamada Tara Reade.
Su más fiero contrincante, el expresidente Trump, con 77 años, está actualmente enfrentando la justicia con diversos cargos federales por lo que podría ser condenado a años de cárcel y no volver a ser presidente de los Estados Unidos.
Es por eso que las candidaturas presidenciales de Biden y Trump están en peligro si las investigaciones de los fiscales federales llegasen a ser confirmadas para luego procesarlos judicialmente.
Joe Biden ganó las elecciones de noviembre de 2020 con más de 81.2 millones de votos (51.3%), imponiendo un nuevo record como el más votado en toda la historia electoral de esta nación.
El expresidente Donald Trump, del Partido Republicano, y quien pretendía reelegirse en el cargo, no estuvo muy lejos. Recibió cerca de 74.2 millones de votos (46.8%).
Uno de los dos requería obtener 270 votos de los colegios electorales de un total de 538 para ganar la presidencia en noviembre de 2020. Biden obtuvo 306 y Trump 232.
Trump no solo perdió las elecciones, sino que aún insiste en no reconocer que fue derrotado y persiste en ser el candidato presidencial republicano para las elecciones de noviembre de 2024.
A pesar de todas las acusaciones, juicios penales y civiles pendientes, Donald Trump aún sigue como favorito para ganar la nominación de su partido republicano.
Biden tendrá 82 años para las elecciones del año que viene, lo que le convierte en el candidato de más edad que se presenta a la reelección.
De los ocho presidentes norteamericanos que han muerto en el cargo, cuatro han sido por asesinato y cuatro por causas naturales.
La edad de Biden ha comenzado a preocupar a los votantes estadounidenses. El 70 % considera que el presidente demócrata no debería buscar la reelección, dice una encuesta de NBC News.
De acuerdo con las estadísticas, la esperanza de vida promedio para un anciano de 82 años es de 6 a 7 años.
Quizás por esas estadísticas y ante visibles señales de que Biden no goza de buena salud, es que hoy vemos a la vicepresidenta de los EE.UU. Kamala Harris ofrecer opiniones públicas de que está preparada para sustituir al presidente “si fuera necesario”.
Para nadie es un secreto que el jefe de la Casa Blanca no está al 100% de su capacidad para cumplir con sus responsabilidades presidenciales. La salud mental y física han sido puestas en duda en múltiples ocasiones incluso por muchos de los miembros de su partido.
Durante los tres años de mandato presidencial de Biden, la vicepresidenta Kamala Harris, de 58 años, siempre evadió preguntas en ese sentido, pero hoy la vemos con frecuencia hablar sobre el tema en entrevistas televisivas.
¿Se está preparando a los estadounidenses para que aceptaren esa realidad en el futuro cercano?
Lo malo de ello es la popularidad de Harris ante la opinión pública. Para la empresa consultora Real Clear Politics, su popularidad está por debajo de la del presidente Biden.
Según su estudio de opinión, encontró que Harris tiene un 40.7% de aprobación de su trabajo por parte del público frente a un 41.7% del presidente.
Otra encuesta de la NBC News realizada entre el 16 y el 20 de junio de este año, reveló que el 49% de los encuestados opinó negativamente de la vicepresidenta.
Actualmente, las primarias republicanas proyectan la elección del expresidente Donald Trump como su candidato presidencial, y éste, según las encuestas, podría vencer fácilmente a la vicepresidenta Kamala Harris si el destino le concede la oportunidad de presentarse como candidata demócrata en las próximas elecciones presidenciales de 2024.