La cruda realidad detrás del escenario de Marysabel Senyu es la situación en que vive la mayoría de nuestros atletas.
Además a sus positivos resultados en la prueba de salto alto, las hojas de zinc, la madera y los agujeros en el techo es la otra cara de la moneda de la recién medallista de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023.
“Desde que gané la medalla de plata en los Juegos Panamericanos Junior Cali Valle 2021 estoy esperando que me ayuden a reparar mi casa materna. He recibido varias promesas, pero que va, al final no me han cumplido”, dijo la espigada atleta que mide 6.4.
La promisoria deportista, que va tras convertirse en la próxima Juana Arrendel, ha reiterado que una de sus metas, además de ganar una medalla olímpica, es poder dar un techo digno a su madre.
“Tenemos un terreno al lado y estamos levantando una casa en block que ya está a nivel de plato, pero se me ha dificultado encontrar alguien que me ayude para poder terminarla y así sacar a mi familia a un lugar más seguro”, explicó Senyu sobre la casa ubicada en Villa La Caoba, en el municipio Villa Hermosa, en La Romana.
Vicisitud
Para la joven de 23 años de edad ha sido tarea difícil sostener a su familia y a la vez darle logros al país.
Marysabel, que devenga un salario de 21,000 pesos como cabo en la Fuerza Aérea Dominicana y 5,000 en el programa Parni, debe maniobrar para cumplir con sus entrenamientos en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
“El cierre de la Villa Olímpica nos afectó a muchos de los atletas que vivimos en el interior, yo tuve que alquilar una pieza aquí en Santo Domingo donde pago 5,500 pesos, para así cumplir con mis entrenamientos y darle lo mejor al país en cada una de mis competencias; no es fácil, porque tengo que ayudar a mis padres, pero no hay nada más satisfactorio para un hijo que ayudar a sus seres queridos”, dijo Marysabel, quien tiene un puesto asegurado en los Panamericanos de Chile, en el octubre.
Petición
— Rendimiento
Senyu hizo un llamado a las autoridades deportivas, incluso la de su pueblo, a extenderle la mano en este momento que más lo necesita: “Quiero que me apoyen, yo estoy muy segura de lo que puedo dar, pero necesito apoyo”.